La custodia compartida implica que ambos padres comparten la responsabilidad y los derechos de criar y cuidar a sus hijos. A continuación, se detallan los principales derechos y obligaciones asociados con la custodia compartida:
Derechos:
- Derecho a pasar tiempo y estar involucrado en la vida del niño: Ambos padres tienen el derecho de pasar tiempo con sus hijos y participar en su crianza, educación y toma de decisiones importantes.
- Derecho a recibir información relevante: Cada padre tiene derecho a recibir información relevante sobre el bienestar del niño, como informes médicos, escolares y eventos importantes.
- Derecho a participar en la toma de decisiones: Ambos padres tienen el derecho de participar en la toma de decisiones importantes relacionadas con la educación, la atención médica, la religión y otras áreas relevantes para el bienestar del niño.
- Derecho a un entorno seguro y saludable: Cada padre tiene el derecho de asegurarse de que el entorno en el que el niño se encuentre durante su tiempo de custodia sea seguro, saludable y adecuado para su desarrollo.
Obligaciones:
- Obligación de cumplir con el plan de custodia: Ambos padres tienen la obligación de cumplir con el plan de custodia acordado o establecido por el tribunal. Esto implica respetar los horarios de intercambio, la comunicación y cualquier otra disposición acordada.
- Obligación de brindar apoyo económico: Ambos padres tienen la obligación de brindar apoyo económico para cubrir las necesidades del niño, como alimentos, vivienda, atención médica y educación. La cantidad de apoyo económico puede determinarse mediante acuerdos mutuos o a través de cálculos establecidos por las leyes o los tribunales.
- Obligación de fomentar la relación con el otro padre: Los padres tienen la obligación de fomentar una relación positiva y saludable del niño con el otro padre. Esto implica evitar hablar mal del otro padre frente al niño y facilitar el tiempo de custodia y las visitas establecidas.
- Obligación de comunicación y cooperación: Ambos padres tienen la obligación de comunicarse de manera efectiva y cooperar en asuntos relacionados con la crianza del niño. Esto implica compartir información relevante, colaborar en la toma de decisiones y resolver cualquier conflicto de manera pacífica y constructiva.