La custodia de un bebé para padres no casados puede ser un tema delicado, pero en términos generales el proceso que se denomina de guarda y custodia es muy similar a una separación matrimonial con hijos.
La custodia de un bebé de padres no casados, el proceso de guarda y custodia, puede gestionarse de mutuo acuerdo, que es la mejor opción, o en su defecto por vía contenciosa.
No hay posibilidad de gestionar un proceso de separación familiar con menores sin la intervención del Ministerio Fiscal y el trámite necesariamente será judicial, no es posible ante notario.
Cuestiones importantes son:
- Acuerdo Mutuo: Idealmente, los padres deberían tratar de llegar a un acuerdo mutuo sobre la custodia del bebé. Esto puede implicar discusiones abiertas sobre cómo compartirán la responsabilidad parental y el tiempo de crianza.
- Crianza Compartida: En muchos lugares, se favorece la idea de la crianza compartida, donde ambos padres tienen derechos y responsabilidades iguales en la crianza del bebé. Esto puede significar un arreglo donde el bebé pasa tiempo con cada padre de manera equitativa.
- Mediación: Si los padres tienen dificultades para llegar a un acuerdo, pueden recurrir a la mediación, donde un tercero neutral puede ayudarles a negociar un acuerdo de custodia que funcione para ambas partes y, lo más importante, para el bienestar del bebé.
- Interés Superior del Niño: En casi todos los sistemas legales, el factor principal considerado en casos de custodia es el «interés superior del niño». Esto significa que cualquier acuerdo o decisión judicial debe tener en cuenta lo que sea mejor para el bienestar y el desarrollo del bebé.
En cualquier caso, en situaciones de custodia de bebés para padres no casados, es fundamental priorizar el bienestar del niño y trabajar en colaboración para garantizar un entorno seguro, amoroso y estable para su crianza.
¿A qué edad puede un bebé quedarse con su padre? Cada caso es diferente y debe de estudiarse de manera individualizada.